En la Galería del Seminario de Cultura Mexicana
LUIS ORTIZ MACEDO MUESTRA 60 AÑOS DE VIDA ARQUITECTÓNICA, MEDIANTE UNA EXPO DE CIEN OBRAS DE ARTE FOTOGRÁFICO
Por Anne Marí
Agencia Periodística Internacional.- El Doctor en Arquitectura por la UNAM, restaurador y defensor de Monumentos Históricos, y Miembro Titular Emérito del Seminario de Cultura Mexicana, Luis Ortiz Macedo; inauguró desde las 12:00 hor
as de hoy sábado 6 de agosto de 2011, en la propia Galería del SCM -- Presidente Masaryk 526, en Polanco, esquina con George Bernard Shaw, Platón y Sócrates--, una impresionante muestra de lo que han significado 60 apasionados años de creatividad intelectual y artística, dentro de su multidisciplinaria vida arquitectónica. A la muestra en la que se sirvió un Vino de Honor, asistieron --entre muchos otros colegas---, profesores de Doctorado y de Maestría, de la Escuela de Arquitectura.
Al charlar con el arquitecto Luis Ortiz Macedo, nos confirmó, que efectivamente, la mayoría de las cien obras expuestas en el amplio espacio del Seminario, representan nada menos que sesenta años de prácticas arquitectónicas. Encontrándose expuestos también entre las mismas, los diplomas y las condecoraciones que ha recibido a lo largo de su carrera.
SUS INICIOS EN LA NACIONAL DE ARQUITECTURA
Explicó el distinguido profesional, que comenzó su carrera en la Escuela Nacional de de Arquitectura, que estaba entonces en la Academia de San Carlos; y que cuando ingresó al cuarto año de carrera, se fue a estrenar la Escuela de Arquitectura construida por el arquitecto José Villagrán García, en Ciudad Universitaria. “Entonces, recordó el expositor, era director de la Escuela de arquitectura el hijo de Federico Mariscal Alonso; y tuve la suerte de pertenecer al alumnado que se inscribió al primer año de carrera, y que eran numerosísimos, debido a las obras que estaban realizando en todo el país el presidente Miguel Alemán con los mejores arquitectos de México”.
Aseveró asimismo el Doctor Ortiz Macedo, que el Maestro Alonso Mariscal, ofreció a tres compañeros de su generación la titularidad prevista para el año siguiente, para que lo ayudaran con los grupos de primer ingreso. “Así que yo comencé a dar clases de historia de la Arquitectura, a los 19 años”.
Pronto, añadió nuestro entrevistado, se relacionó con el Seminario de Historia de la Arquitectura, que presidía el crítico de arte Juan de la Encina, con los arquitectos César Novoa Magallanes y Ricardo de Robina, quienes lo introdujeron con Carlos Mijares Bracho y Raúl Henríquez, al llamado Grupo de Viena. “De esta manera, observó Ortiz Macedo, ingresé al Taller de Ricardo de Robina y, cuando fue nombrado César Novoa director de obras Portuarias, me llevó como arquitecto diseñador. Sin embargo, yo seguí trabajando por mi cuenta en casas y edificios de los amigos de mi padre y, al mismo tiempo, daba clases en Ciudad Universitaria”.
GIRA CON LÓPEZ MATEOS
No omitió el arquitecto y académico, que en 1960, acompañó al Presidente López Mateos a su recorridos por América del Sur, llevando una exposición que había preparado el Presidente del Colegio de Arquitectos, Luis González Aparicio, con la buena suerte que al regresar a México, “tuve la fortuna de que me mandaran con una Beca, a París, en el curso preparatorio de los arquitectos encargados de los monumentos franceses. Pasé tres años trabajando con los arquitectos en Estrasburgo, Bruselas, y Madrid. Y al regresar a México el director de la Escuela de Arquitectura de Guanajuato, Víctor Manuel Villegas, me presentó al gobernador el licenciado Juan José Torres Landa, para encargarme del Instituto de Restauración de Monumentos, el primero en todo el Continente Americano”.
Hizo referencia también, el autor de “Plano de la Ciudad de México”, que realizó tomando como punto de partida los valiosos trabajos de Pedro de Arrieta, en 1737; que con la arquitecta Ruth Rivera, formó un despacho, “y seguí dando clases en la Escuela de Arquitectura y en la recién fundada Escuela de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana”.
YAÑEZ LO NOMBRÓ SUBSECRETARIO
Con el tiempo, señaló Ortiz Macedo, “fui director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Anáhuac, y el licenciado Agustín Yáñez entonces Secretario de Educación, me hizo subsecretario de Cultura y posteriormente fui director del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, y director del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Cuando fui subsecretario de Cultura, me encargaron los monumentos del presidente Juárez, en Roma, Italia; en la Ciudad de Guatemala; en la ciudad de Washington; Santo Domingo, República Dominicana y Asunción Paraguay. Y al entrar como Presidente Miguel de la Madrid Hurtado, me convidó a presidir como vocal ejecutivo del Centro Histórico de la ciudad de México”.
Expuso, que también se ha desarrollado a través de la Iniciativa Privada, como ejecutivo de Fomento Cultural Banamex, y en el Instituto Cultural Domecq, organizando proyectos muy especiales como aquellas 11 Bienales Iberoamericanas de Arte. He seguido dando clases en la Maestría de Restauración de Monumentos, de la Escuela Nacional de Arquitectura y pertenezco como Miembro Emérito del Seminario de Cultura Mexicana.
as de hoy sábado 6 de agosto de 2011, en la propia Galería del SCM -- Presidente Masaryk 526, en Polanco, esquina con George Bernard Shaw, Platón y Sócrates--, una impresionante muestra de lo que han significado 60 apasionados años de creatividad intelectual y artística, dentro de su multidisciplinaria vida arquitectónica. A la muestra en la que se sirvió un Vino de Honor, asistieron --entre muchos otros colegas---, profesores de Doctorado y de Maestría, de la Escuela de Arquitectura.Al charlar con el arquitecto Luis Ortiz Macedo, nos confirmó, que efectivamente, la mayoría de las cien obras expuestas en el amplio espacio del Seminario, representan nada menos que sesenta años de prácticas arquitectónicas. Encontrándose expuestos también entre las mismas, los diplomas y las condecoraciones que ha recibido a lo largo de su carrera.
SUS INICIOS EN LA NACIONAL DE ARQUITECTURA
Explicó el distinguido profesional, que comenzó su carrera en la Escuela Nacional de de Arquitectura, que estaba entonces en la Academia de San Carlos; y que cuando ingresó al cuarto año de carrera, se fue a estrenar la Escuela de Arquitectura construida por el arquitecto José Villagrán García, en Ciudad Universitaria. “Entonces, recordó el expositor, era director de la Escuela de arquitectura el hijo de Federico Mariscal Alonso; y tuve la suerte de pertenecer al alumnado que se inscribió al primer año de carrera, y que eran numerosísimos, debido a las obras que estaban realizando en todo el país el presidente Miguel Alemán con los mejores arquitectos de México”.
Aseveró asimismo el Doctor Ortiz Macedo, que el Maestro Alonso Mariscal, ofreció a tres compañeros de su generación la titularidad prevista para el año siguiente, para que lo ayudaran con los grupos de primer ingreso. “Así que yo comencé a dar clases de historia de la Arquitectura, a los 19 años”.
Pronto, añadió nuestro entrevistado, se relacionó con el Seminario de Historia de la Arquitectura, que presidía el crítico de arte Juan de la Encina, con los arquitectos César Novoa Magallanes y Ricardo de Robina, quienes lo introdujeron con Carlos Mijares Bracho y Raúl Henríquez, al llamado Grupo de Viena. “De esta manera, observó Ortiz Macedo, ingresé al Taller de Ricardo de Robina y, cuando fue nombrado César Novoa director de obras Portuarias, me llevó como arquitecto diseñador. Sin embargo, yo seguí trabajando por mi cuenta en casas y edificios de los amigos de mi padre y, al mismo tiempo, daba clases en Ciudad Universitaria”.
GIRA CON LÓPEZ MATEOSNo omitió el arquitecto y académico, que en 1960, acompañó al Presidente López Mateos a su recorridos por América del Sur, llevando una exposición que había preparado el Presidente del Colegio de Arquitectos, Luis González Aparicio, con la buena suerte que al regresar a México, “tuve la fortuna de que me mandaran con una Beca, a París, en el curso preparatorio de los arquitectos encargados de los monumentos franceses. Pasé tres años trabajando con los arquitectos en Estrasburgo, Bruselas, y Madrid. Y al regresar a México el director de la Escuela de Arquitectura de Guanajuato, Víctor Manuel Villegas, me presentó al gobernador el licenciado Juan José Torres Landa, para encargarme del Instituto de Restauración de Monumentos, el primero en todo el Continente Americano”.
Hizo referencia también, el autor de “Plano de la Ciudad de México”, que realizó tomando como punto de partida los valiosos trabajos de Pedro de Arrieta, en 1737; que con la arquitecta Ruth Rivera, formó un despacho, “y seguí dando clases en la Escuela de Arquitectura y en la recién fundada Escuela de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana”.
YAÑEZ LO NOMBRÓ SUBSECRETARIO
Con el tiempo, señaló Ortiz Macedo, “fui director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Anáhuac, y el licenciado Agustín Yáñez entonces Secretario de Educación, me hizo subsecretario de Cultura y posteriormente fui director del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, y director del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Cuando fui subsecretario de Cultura, me encargaron los monumentos del presidente Juárez, en Roma, Italia; en la Ciudad de Guatemala; en la ciudad de Washington; Santo Domingo, República Dominicana y Asunción Paraguay. Y al entrar como Presidente Miguel de la Madrid Hurtado, me convidó a presidir como vocal ejecutivo del Centro Histórico de la ciudad de México”.
Expuso, que también se ha desarrollado a través de la Iniciativa Privada, como ejecutivo de Fomento Cultural Banamex, y en el Instituto Cultural Domecq, organizando proyectos muy especiales como aquellas 11 Bienales Iberoamericanas de Arte. He seguido dando clases en la Maestría de Restauración de Monumentos, de la Escuela Nacional de Arquitectura y pertenezco como Miembro Emérito del Seminario de Cultura Mexicana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario